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domingo, 12 de diciembre de 2010

El chayj príncipe y el chayj pobre

Bismi-l-Lahi-r-Rahmani-r-Rahim

Allahumma salli ‘ala sayyidina Muhammadin ‘abdika wa rasulika nabiyyi-l-‘umiyyi wa ‘ ala ‘alihi wa sahbihi wa sallimu taslima.

Un dicho sufi magrebí dice : « Chayju-l-‘amir tablon kabir. Chayju-l-faqir abdu-l-hakir” (el chayj orgulloso y del orgulloso se muestra con gran ostentación. El chayj del humilde aspirante espiritual es un siervo humilde de Allah).

Vamos a dedicar primeramente unas palabras para definir al chayj del ‘amir:

Turbante cortado de las mejores telas de Oriente, vueltas medidas con precisión, ni una más ni una menos. Túnica tejida por las manos profesionales de los sastres más refinados. Calzado, diríase hecho a medida. Camisas del mejor tejido de algodón local. Barba cuidada cabello a cabello, haciendo juego con el turbante y el resto de la indumentaria. Raro aroma a caro perfume oriental. Andar pausado, ensayado una y otra vez. Gestos cuidados al extremo de la precisión. Mirada de águila, directa a la presa. Diríase salido de un cuento de las mil y una noches. He aquí al chaiju-l-‘amir.

Habiendo estudiado algunos libros de los antiguos maestros, ha aprendido de qué expresiones enriquecer su lenguaje para ser admirado por su verbo enigmático, y a la vez adornado con los giros pertinentes, destinados a crear un ambiente elitista a su alrededor. Habla cuidada hasta la saciedad. Escritos modificados una y otra vez, hasta encontrar el punto de cocción adecuado para ser presentados. Poco importa se hable mentira o verdad, lo importante es hablar “bello” y dar un tono grandioso al discurso.

Siempre lejos de sus discípulos, a los cuales evita todo lo posible. Así, el gran chayj puede preservar su intimidad, puede ocultar su verdadera personalidad. Pavo real en público y tigre en privado. Buscará como la élite de sus discípulos a los más acaudalados. Un poco más abajo, aquellos quienes hayan cursado estudios universitarios y estén bien colocados en su vida laboral. Desafortunadamente, no hay más remedio que tener lacayos, y estos serán el populacho de sus discípulos, los cuales tendrán acceso, si se lo ganan con su demostrada sumisión, a una o dos entrevistas en toda su vida con el gran chayj. En dicha entrevista el chayj, preparado previamente ante el espejo, te mirará a los ojos y observará como vienes. Si vienes sumiso y temeroso, te alabará y te dirá de continuar así. Tendrás derecho a una estampita de él (foto) para colocarla en la mesilla de noche. Si vienes sumiso, pero a la vez ve que eres algo inteligente, te dará un discurso, el cual habrá aprendido la noche anterior para dártelo solamente a ti, habiéndose informado previamente sobre tu persona, a fin de poder causarte impresión. Pero, si viene alguien no previsto, para eso estará rodeado de lacayos, quienes no dejarán hablar ni decir nada sin el permiso del gran chayj.

Todo está medido, programado para mantener la fuente de ingresos necesaria, y así hacer marchar el engranaje de la empresa. Solamente los directores tendrán acceso al Presidente, el cual, en su pedestal, cual si de un ídolo se tratara, estará preservado de la plebe y de las críticas verídicas de aquellos, quienes indignados por sus mentiras, quieran ir hacia él para expresarle su mensaje.

Vivirá en un castillo o una villa, porque él se lo merece. Estando por encima de las contingencias mundanales como está, reside ya en el paraíso, de donde baja por misericordia, a fin de encontrarse con los pobres de sus discípulos, quienes, a pesar de todo seguirán creyendo ciegamente en él.
El chayj ha dicho, el chayj ha hecho, el chayj se ha movido así o asá, ha ido aquí o acuyá. Ooooohhhh, el gran chayj. Ni más ni menos que el chayju-l-‘amir.

Poco importa que diga que los ángeles tienen un conocimiento completo, siendo esto mentira. Poco importa que diga que tal y tal grandes chuyuj del pasado se le hayan aparecido físicamente, siendo ello imposible. El es el gran chayj, y no puede mentir. Poco importa que contradiga el Qur’an y la Sunna, el Gran Chayj siempre tiene razón. Poco importa que diga que el Mehdi-l-muntadar nació va a aparecer en tal o cual año. Seguramente el gran chayj le tenga en su palacio tomando el té hasta que se deba mostrar. ¿Qué importa que Rasul – sobre él la gracia y la paz – haya dicho que el mismo Mehdi no sabría quien es hasta el comienzo de su misión? ¿Qué importa eso? Tiene razón el gran chayj, amigo de los poderosos y de los bien colocados de la Dunya.

Qué diferencia con el chayju-l-faqir!

El chayju-l-faqir, descuidado de si mismo, excepto en lo que respecta a las condiciones de cumplimiento de lo que Allah ordena y prohíbe. Viste humildemente, a veces su vestido está remendado o repiezado. Nunca guarda dinero y siempre encuentra su sustento. No busca a los poderosos, los evita. Poco le importa su alimento, si este es halal, entonces Bismi-l-Lah. Se reirá hasta la saciedad de los ricos bordados y los adornos mundanales.

Considera en nada lo que cada uno traiga en el bolsillo. Si no puede viajar en avión, lo hará en autobús, aunque este estuviera repleto de gente. Sino a pié, recitando el Qur’an por el camino.

Cuidará de que su vestido no sea caro para así poder dar de comer al necesitado. Trabajará con los obreros, se manchará con ellos y comerá en su compañía. Su habla espontánea, pero certera, irá al fondo del asunto. No necesita preparar nada pues todo lo tiene dentro, en su corazón.

Nunca preguntará por quien viene a verle. Espontáneamente le verá con una mirada profunda y verídica. Poco le importa le llames de usted o de tu. Será tu camarada, tu amigo, sí; pero cuidado amigo, no se te ocurra mentir! Si lo haces te llevarás una reprimenda la cual no podrás olvidar mientras vivas, y aún así, nunca podrás decir que te ha faltado el respeto.

Vista certera, palabra sincera, desprendimiento de los bienes y placeres mundanales, conocimiento profundo del Libro de Allah en sus siete niveles, así como de la Sunna del Profeta – sobre él la gracia y la paz -, son los datos de su carnet de identidad.

Poco le importa seas rico o pobre. Si eres rico, te pedirá des a los pobres, pero nunca te pedirá nada para él. Si eres pobre, te dará de su propia mano. Si eres sincero, se ocupará de ti y guardará el compromiso contigo mejor que tu lo puedas hacer con él.

Te dirá: - “No pongas tu vista en mí, mira hacia adelante, mira hacia Allah. Nosotros los chuyuj somos una palabra y una ayuda para indicarte el camino y acompañarte en el recorrido, pero si no pones tu mirada en Allah, nada podemos hacer por ti - .

Y ahora dite a ti mismo que prefieres el chayj al amir o el chayj al faqir. Date la respuesta y así autoevaluarás tu situación en el camino del Islam.

Y Allah sabe más

6 comentarios:

  1. salam ´aleykum

    Realemente bello, gracias hermano.
    salam
    Anouar

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  2. A-s-salamu 'alaykum:

    Lo triste es que ello existe en realidad. Cuánto han sufrido los chuyuj verdaderos. Te voy a poner un ejemplo:
    Ibn Ata'i-l-Lah al Iskandary hubo de escribir sus hikam siete veces. Se los robaron seis veces, y logró escribirlos la séptima vez porque los había memorizado.
    Sin embargo, los que comen de contar historias, en esta época están con las arcas repletas y con sus casas construidas y adornadas hasta el último detalle.
    Pidamos a Allah que ello dure muy poco.

    Salam

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  3. salam ´aleykum
    Ojalá sea así.Es asombroso el nivel de negocio que alcanzas ciertas asociaciones.Deberían mostrar, como toda asociación que se preste, todas sin excepción, el origen de sus ingresos, el lugar de destino, balances, etc.Y que no nos utilicen y nos usen para sus propios fines.Menos mal que algunos son muy demócratas y transparentes, pero en cuestión de dinero más oscuros que un tizón...
    salam
    Anouar

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  4. A-s-salamu 'alaykum:

    Tienes razón. Y precisamente el tema de transparencia en el dinero es clave para evaluar la sinceridad o falta de ella de las asociaciones. Si alguien trabaja con dinero público o ajeno en nombre del Islam, está ciertamente obligado a dar toda la información detallada de su uso SIN que nadie se la pida.

    Salam

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  5. Exacto, en un grupo de estos, llego una de sus figuras principales al pais, Hisham, el yerno de Nazim, en Glew, una ciudad pobre de gente pobre le pusieron una mesa con blancos manteles, y todos los lujos, a el, a su hija y a su comitiva, mientras que la gente del lugar se sentaba en el suelo, en donde podia, y comia cordero si sobraba de la mesa de Hisham etc, como si fueran perros. Yo estuve alli y por eso lo digo

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    1. A-s-salamu 'alaykum:

      Eso me temía. En una ocasión, un peruano haqqani se enfadó mucho conmigo porque yo decía que su chayj no es un verdadero chayj. En uno de los comentarios me dijo que a los discípulos que no se portaban "bien" los mandaban a cuidar y limpiar los animales.
      Yo le respondí que en nuestra tariqa el cuidar y limpiar los animales era un "privilegio" que el chayj tomaba solamente para él.

      Salam

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